California es conocida por su sol y su costa infinita, pero en invierno, el mismo estado que inspira surf y vino también invita a vivir la magia de la nieve. Desde las montañas del norte hasta los pinos del sur, el Golden State ofrece aventuras invernales con paisajes de postal, gastronomía de montaña y alojamientos únicos.

Lake Tahoe: el corazón alpino de California
Ubicado en la frontera con Nevada, Lake Tahoe es el destino invernal por excelencia.
Sus estaciones de esquí —Heavenly Mountain Resort, Palisades Tahoe y Northstar California Resort— ofrecen pistas de todos los niveles, vistas al lago y après-ski con estilo californiano.
El área combina aventura y descanso: cabañas con chimenea, senderos panorámicos, paseos en trineo y gastronomía local con vino del Valle Central.
Tip de viajero: En Tahoe se puede esquiar por la mañana y cenar junto al lago al atardecer, con el reflejo de las montañas nevadas sobre el agua azul.

Lassen Volcanic National Park: nieve entre géiseres y volcanes
En el norte del estado, Lassen Volcanic National Park es una joya poco conocida. Aquí, fumarolas humeantes, picos nevados y lagos congelados crean un paisaje único en el mundo.
Durante el invierno, se puede practicar snowshoeing (caminata con raquetas), esquí de fondo o recorridos fotográficos por las zonas termales.
El parque también ofrece cabañas rústicas y áreas ideales para disfrutar del silencio y la naturaleza pura.
Mount Shasta: mística, montaña y aventura
Cerca de la frontera con Oregón, se eleva Mount Shasta, una de las montañas más altas y espirituales de California.
Con sus 4,322 metros de altura, es ideal para practicar senderismo, esquí o snowboard, pero también para retiros de bienestar y meditación.
El pueblo de Mount Shasta City combina tiendas locales, cafés, rutas de cascadas y vistas inolvidables del pico nevado.
Yosemite National Park: un clásico bajo la nieve
Yosemite es espectacular todo el año, pero en invierno se transforma en un cuento blanco.
Los visitantes pueden disfrutar de patinaje sobre hielo frente al Half Dome, paseos guiados en raquetas por Badger Pass Ski Area, o simples caminatas por el valle cubierto de nieve.
Además, los lodges dentro del parque, como el histórico Ahwahnee Hotel, ofrecen chimeneas encendidas y cenas gourmet con vino local.
Mammoth Lakes: la experiencia completa de montaña
Ubicado en la región de Eastern Sierra, Mammoth Lakes combina nieve, naturaleza y vida nocturna.
Su estación Mammoth Mountain tiene más de 3,500 acres de terreno esquiable (alrededor de 14 kilometros), ideal para esquí alpino, snowboard y snow tubing.
El centro del pueblo ofrece cafés, bares, tiendas y una vibrante atmósfera de resort. Además, es la base perfecta para explorar las Mammoth Hot Springs, pozas termales naturales rodeadas de nieve.
Big Bear Lake: la escapada perfecta desde Los Ángeles
A solo dos horas y media de Los Ángeles, Big Bear Lake es el destino favorito para escapadas de fin de semana.
Con sus estaciones Snow Summit y Bear Mountain, ofrece actividades para toda la familia, desde esquí y snowboard hasta tubing, paseos en trineo y caminatas panorámicas.
El lago congelado, las cabañas de madera y las luces del pueblo crean un ambiente acogedor, perfecto para parejas o grupos de amigos.
Entre viñedos y montañas: el sabor del invierno
El invierno en California no solo se vive en las montañas. Regiones vinícolas como Sonoma, Paso Robles o el Central Valley permiten disfrutar catas entre paisajes dorados y experiencias de “vino y nieve” únicas en el país.
Los visitantes pueden combinar un día de esquí con una tarde enológica o escaparse a un spa con vistas a los viñedos invernales.

Información útil para tus próximas vacaciones nevadas_
- Temporada de nieve: de noviembre a abril.
- Principales aeropuertos de acceso: Reno-Tahoe, San Francisco, Fresno Yosemite, Mammoth Yosemite y Los Ángeles.
- Actividades destacadas: esquí, snowboard, senderismo invernal, termales, glamping, vino y bienestar.
Para más información consulta la página www.visitcalifornia.com




