La historia geológica de Nueva Zelanda le ha dado uno de los escenarios más sorprendentes del mundo, la tierra de los fiordos, un sitio que se ha ganado el nombramiento por parte de la UNESCO como Patrimonio Natural de la Humanidad. En la costa suroeste de la isla sur de Nueva Zelanda se localiza Te Rua-o-te-moho, nombre en maorí del Parque Nacional Fiorland, un sitio que nos presenta escenarios fantásticos. Un sitio cuya historia invita a imaginar lo difícil que fue para los maoríes viajar en embarcaciones labradas sorteando los peligros del mar y el clima, cuál abría sido su impresión al presenciar los paisajes naturales desplegándose poderosamente a su paso, un escenario en que el océano penetra a la tierra creando canales anchos y estrechos, donde las montañas salen abruptamente a sus costados como si fueran gigantes y de sus acantilados emanan cascadas que se arrojan en picada al mar. Este es uno de los sitios más húmedos del planeta, con 200 días de lluvia al año. Sus bosques templados donde miles de helechos de todos tamaños, árboles prehistóricos y musgos de distintas especies albergan animales sorprendentes, como aves sin alas y pericos alpinos que prefieren el suelo a la copa de árbol. 
Los propios neozelandeses aseguran que “La Tierra de los Fiordos” es uno de los sitios mejor preservados y más puros del país. Su clima y su geografía varían drásticamente del nivel del mar y su sistema costero hasta las grandes montañas y valles que propician diversos hábitats donde la flora y la fauna son únicas. Es una obra de la naturaleza que tomo alrededor de 500 millones de años formarse y que continúan cambiando de manera casi imperceptible para el hombre.
Los mejores paisajes
En el siglo XVII, el capitán James Cook, famosos explorador inglés puso a este parque con sus 14 fiordos en los mapas. Hoy en día es posible tomar alguna embarcación para recorrer Milford Sound y Doubtful Sound, incluso se puede pernoctar entre los fiordos. Si algo se toman muy enserio los neozelandeses es la conservación de la naturaleza, por lo mismo no existen muchas compañías que realicen este tipo de expediciones. El viaje desde Queenstown hasta los fiordos lleva casi todo el día, el acceso por tierra es muy accidentado, hay que cruzar por pasos montañosos y enfrentar las nevadas y las nieves eternas; han implementado diversos sistemas de seguridad y un intenso monitoreo de las condiciones de la carretera y sus túneles. Desde Te Anau, ubicado a orillas de un lago espectacular, se puede llegar a Milford Sound y Doubtful Sound. Cada uno esconde rincones asombrosos como las gargantas formadas por la erosión fluvial en The Cashm, el lago Gunn, los picos Monkey, Comander y el Mount Grono, el valle Hollyford, los lagos Mirror, los pasos montañosos Mackinnon, así como la planta hidroeléctrica de Manapouri construida a 200 metros de profundidad 
La vida marina es uno de los grandes atractivos del parque, durante los recorridos en kayak o en crucero se pueden observar delfines nariz de botella, lobos marinos y pingüino azul y el crestado de ojos amarillos. Pero bajo el mar se revela uno de los grandes misterios de sus ecosistemas, un fenómeno que se llama “emergente de aguas profundas”, crea a unos metros de la superficie un medio ambiente similar al del océano profundo. Es posible contratar un tour para buceo o visitar el observatorio marino Milford Deep, localizado en medio de la Reserva Marina Piopiotahi (Milford), que permite observar en su estado natural anémonas, esponjas, coral rojo y negro, víboras, peces y estrellas de mar entre otras especies. Después de presenciar la belleza natural de los fiordos neozelandeses es fácil entender porque Rudyard Kipling, el autor del “Libro de la Selva”,·los consideraba la Octava Maravilla del Mundo; o porque Peter Jackson, director de la trilogía de “El Señor de los Anillos”, los eligiera como uno de los escenarios que llevarían el imaginario de Tolkien a la pantalla grande.
MAORIES
El saludo tradicional en maorí es “Kia Ora” y desde que uno llega a Nueva Zelanda le recuerda al visitante que estos antiguos guerreros son los guardianes de estas tierras. Se dice que los maoríes fueron los primeros en poner pie en Fiorland, aproximadamente hace 800 años, aunque existe poca evidencia de su presencia se cree que realizaron exploraciones en grandes canoas e incluso algunas tribus que habitaban en el este de la isla llegaban a cruzar peligrosos pasos montañosos para llegar a los fiordos. 
Cómo llegar: desde México es necesario viajar a Los Ángeles o San Francisco donde encontrará vuelos directos a la ciudad de Auckland y conección a Queenstown. Una de las opciones de transporte es por Air New Zealand línea aérea bandera, misma que cuenta con múltiples vuelos en el interior del país. United y American Airlines también cuentan con vuelos a Nueva Zelanda.
Costo: viaje redondo México-Queenstown desde 1500 hasta 2500 dólares, dependiendo de la temporada. Información en: www.airnewzealand.com. Para visitar los fiordos es necesario llegar a Queenstown para tomar desde ahí un servicio de autobús ordinario a Te Anau o Manapouri, son la base ideal para explorar este lugar, cuyos principales recorridos son conocidos como Milford Sound y Doubtful Sound. La otra opción es contratar directamente un tour a los fiordos, también es posible tomar un viaje escénico en avioneta.
Dónde dormir: La oferta hotelera es amplia y muy diversificada, desde los hoteles de gran turismo, hasta los hostales para mochileros, pasando por hoteles funcionales de 3 y 4 estrellas y acogedores “bed & breakfast”. En las oficinas de turismo encontrará información más que suficiente. Los precios oscilan entre los 400 y los 6 mil pesos.
Fiorland Lodge: 472 Te Anau-Milford Highway, P.O.Box 196, Te Anau 9640. Tel. +64 3 249 7832, [email protected], www.fiordlandlodge.co.nz. Costo: desde 640 hasta 1080 NZD en ocupación doble.
Fiordland National Park Lodge: Te Anau-Milford Sound Highway, Te Anau.
Información: [email protected], www.fiordlandnatparklodge.co.nz. Costo: 150 NZD habitación doble con desayuno incluido.
Lakeside Motel: 36 Lakefront Drive, Te Anau. Tel. +64 3 249 7435, [email protected], www.lakesideteanau.com. Costo: habitación doble 100 a 200 NZD por noche.
Radfords Lakeview Motel: 56 Lakefront Drive, Te Anau. Tel. +64 3 249 9186, [email protected], www.radfordslakeviewmotel.co.nz. Costo: desde 130 a 260 NZD para habitaciones de 2 y 4 personas.
Actividades: hay varias opciones para disfrutar de estos paisajes, desde cruceros dentro de los fiordos Milford, Doubtful, Dusky y Breaksea, ya sea de un día, una noche o varias noches; escalada por los senderos montañosos, de diferentes niveles y pueden ser de unas horas o de varios días. También hay recorridos que combinan actividades como el kayak y las caminatas; tours de buceo y pesca deportiva. Tres de las mejores caminatas del país se encuentran en este parque: Milford Track, Routeburn Track y Kepler Track; Nueva Zelanda es uno de los pocos sitios del planeta hechos para caminar en toda su extensión, es posible recorrerlos de forma independiente o con un guía especializado.
Tours en los fiordos Real Journeys, tiene una de las mayores operaciones en los fiordos cuenta con expediciones con naturalistas, viajes en crucero de unas hora so de una noche, visitas a las cavernas y más.
Costos aproximados: Desde $87 NZD hasta 828 NZD por persona.
Información: www.realjourneys.co.nz
Milford Flights: ofrece paseos en avioneta por los fiordos. Las salidas son desde Queenstown y es una excelente oportunidad de combinar los cruceros con el vuelo. Costo: 400 NZD por persona.
Información: www.milfordflights.co.nz.
Clima: La temperatura promedio oscila entre los 23 y los 16 grados centígrados durante el verano (de diciembre a febrero) y es frío en invierno con alta humedad. De noviembre a febrero son los días más despejados y las mayores precipitaciones ocurren de junio a septiembre. 
Seguridad: Es importante verificar el clima, las tormentas de nieve y las lluvias pueden terminar por cerrar algunos senderos.
Qué llevar: Procure llevar solo una pequeña maleta para pasar la noche. Además llevar zapatos o botas cómodos para caminar, impermeable, ropa de abrigo, un cambio de ropa, lentes de sol, protector solar, repelente, traje de baño.
Qué comprar: La artesanía maorí, notable por sus tallas en madera, así como todo tipo de textiles de lana de oveja merino, constituyen lo más interesante entre los recuerdos típicos.
Visa: Los mexicanos no necesitan visa para ingresar a Nueva Zelanda, basta con tener el comprobante del vuelo de salida del país.
Información: Turismo de Nueva Zelanda www.newzealand.com El parque nacional http://www.fiordland.org.nz/ Te Anau http://www.teanau.info/ y http://www.atoz-nz.com/teanau.asp 
