Con la intención de mantener el legado culinario puramente italiano de los inmigrantes del siglo XIX, Lucky Luciano ofrece el sazón más exquisito en su gastronomía, principalmente en sus pizzas que se vanaglorian como la especialidad de la casa.
“Las elaboramos al horno de piedra con leña y materia prima de calidad, lo que brinda a las pizzas una consistencia mucho más crujiente que respeta los sabores tradicionales de Italia”, explica Luciano Seri, anfitrión del restaurante-bar.
Pero el gusto al paladar no exclusivo de este lugar, digno de una atmósfera al estilo neoyorkino que se define por su decoración, los detalles de la iluminación y el mobiliario que lo perfilan como uno de los rincones predilectos de la ciudad de México.
Son sus amplias áreas de terraza donde se puede disfrutar de especialidades como pulpo grillado; pizza Scampi preparada con camarones, ajo, chile de árbol y mozzarella o una de las pastas que dejan claro su sabor casero. Para rematar un cheese cake que se jacta de tener múltiples seguidores.
Para que la estancia en este lugar sea aún más agradable, la música nunca puede faltar, así que ritmos como el funk, rythm&blues, jazz y rock acústico crean el ambiente perfecto que se disfruta en compañía de aquellas personas que resultan las mejores cómplices en el arte de la degustación.
Charles “Lucky” Luciano, nacido como Salvatore Lucania (24 de noviembre de 1897 en Lercara Friddi (Sicilia) – 26 de enero de 1962 en Nápoles) fue un famoso mafioso italo-estadounidense. Se le considera el padre del crimen organizado tal como se conoce hoy en día. Fue el cerebro del gran auge del tráfico de heroína en la postguerra mundial. Oficialmente está considerado como el primer Don de la moderna familia Genovese.
Su verdadero nombre era Salvatore Lucania. Su familia emigró a los Estados Unidos en 1907. Vivió con su familia en un barrio judío de Nueva York, y se dice que allí conoció a los que más tarde serían sus socios: Meyer Lansky y Bugsy Siegel.
En 1911 ya fue detenido por primera vez por robo pasando sus primeros meses en una correccional. En 1915 ya tenía su propia banda en East Harlem. A los 18 años fue sentenciado a 6 meses por vender heroína y morfina. A la salida del reformatorio comenzó su carrera criminal en la banda “Five points gang” con Frank Costello.
Hacia 1920 Luciano ya conocía a muchos de los peces gordos de la Mafia y se dedicaba con ahínco al negocio del alcohol en la época de la Prohibición en las áreas de Nueva York y Filadelfia. Eran tales sus conexiones que importaba directamente whisky de Escocia y Canadá y ron del Caribe. También controlaba el negocio del juego.
En 1927 ya era considerado un hombre millonario. Usaba como expediente la narcoprostitución, es decir hacía a las prostitutas adictas a la heroína y les pagaba con droga.
Tras la guerra entre familias de capos,1928 a 1931, quedo como jefe de capos y reorganizó su propia familia nombrando a Vito Genovese como su segundo y a Frank Costello consiglieri. Caporegimes suyos eran Michael Coppola, Anthony Strollo, Joe Adonis y Anthony Carfano, mientras que Lansky y Siegel cumplían la función de consejeros especiales.
El reinado de Luciano fue relativamente breve, ya que muy pronto sufriría el acoso del Fiscal Especial Thomas E. Dewey. En 1936, Dewey consiguió una acusación formal contra Luciano por proxenetismo.
Tras esos momentos de gloria, Luciano fue encarcelado y le fue propuesto un trato por el gobierno de los Estados Unidos: A cambio de su ayuda a la invasión aliada en Sicilia, le ofrecieron la deportación a Roma. Una vez en Italia, Luciano se radicó en Nápoles, donde era una celebridad especialmente con los turistas y los marineros norteamericanos. Allí en Italia pensó escribir sus memorias e incluso que se hiciera una película sobre su vida pero, en el momento de reunirse con un productor de cine, Luciano, justo antes de estrecharle la mano en el aeropuerto de Nápoles, se echó la mano al pecho y falleció de un infarto.
Masaryk 264 esq. Arquímedes, Polanco
Fotos: cortesía Lucky Luciano